Mi amiga Andrea Montaño quien era para mí como un alma gemela por la profunda conexión que tuvimos, murió en un accidente automovilístico en noviembre de 2004 a la edad de 18 años. Apenas un día antes habíamos ido con un fulano a leernos el tarot. No es que fuéramos muy asiduas de ello, fue algo totalmente aleatorio, más como un juego que con una intención de conocer nuestro destino. Nunca imaginamos lo que estábamos por escuchar al tratarse de malas noticias, y se trataba de mi amiga: — En menos de tres días tendrás un accidente muy aparatoso. —le dijo el brujo. —¿Me voy a morir? —No —¿Me voy a morir? —No. Cuando preguntó por tercera vez, la interrumpí y le pedí que se callara (literalmente nos llevábamos como hermanas) y que tomara la respuesta que él hombre le daba. Recuerdo que un poco incrédula, no le di importancia a la información que nos dieron, pero noté a mi amiga pensativa a partir de ese momento. No es el objetivo de ésta entrada promover este tip
¿Te ha pasado? Que de pronto en tu vida ocurre algo que marca el cambio de rumbo. Estos cambios pueden ser para bien o para mal. En ésta entrada nos enfocaremos en el cambio para mejorar. No es necesario que sea año nuevo para que tu vida sea marcada por cambios, aunque si tu deseo de ese cambio es intenso en estos días, es mucho más probable que lo consigas. Pero la realidad que es que, por lo general, uno no decide cuándo vendrá ese evento, lo que se conoce como tu punto de inflexión que son momentos en los que tu vida da un giro y se puede decir que hay un antes y un después. Ese día en el que hiciste algo, decidiste tomar el timón, hacerte cargo, ser responsable contigo mismo y ese día tu vida cambió para mejor. Es triste pero cierto que estos puntos de inflexión sólo se dan rara vez y que pasemos el resto de los días cual mares revueltos, sin un rumbo claro sin tomar con firmeza el timón. En mi caminar he experimentado cambio a nivel masivo, y recuerdo lo q