5 pensamientos negativos que obstruyen tu crecimiento espiritual

El discurso es una herramienta poderosa. La forma en la que elegimos expresarnos consciente o inconscientemente es un reflejo claro de nuestra mentalidad y emociones. Y sin embargo, más que un simple reflejo, las palabras son una forma de acción y cargan un peso similar. La mente proyecta imágenes o lleva un pensamiento a puntos en los que no nos sentimos cómodos. La mente es como un niño, se agarra de cosas que no debería agarrar. Ésta acción de “agarrar” no necesariamente significa que el “niño” quiere el objeto que trata de alcanzar. Hay muchas razones por las que nuestra mente hace esto, pero en su mayor parte es por simple y sencillamente ejercitar su habilidad de hacerlo. 

Este acto de hacer algo por hacerlo se traduce en nuestro discurso también. Sin censura, nuestras mentes pueden hacer su propia tormenta. Las palabras cargan una fuerza e influencia diferente a los pensamientos. Existe un elemento más cuantificable respecto al efecto inmediato de las palabras. El discurso es una forma intangible de acción que se deriva del pensamiento. Tan pronto como conviertas un pensamiento o intención en acción deja tu campo de influencia y se vuelve una entidad separada. Una palabra cruel no puede ser revertida. Se necesita de más acciones para reparar el daño.

Con frecuencia usamos el lenguaje más cruel con nosotros mismos. Nuestras mentes siempre están divagando, condenando estoy criticando aquello. A veces tontamente ventilamos estos pensamientos generalmente en forma de broma. El brillo sarcástico en una frase que lastima al corazón no detiene el daño. En todo caso envenena a todo el que lo escuche haciéndoles creer que no pasa nada.

A continuación se mencionan unas frases que usamos comúnmente  para crear una entidad negativa separada. Con la intención de bajar el vapor o de medio justificarnos usamos éstas frases que se convierten en acciones que nos lastiman y nos vuelven lentos.

 “Qué estúpid@”

Hay tantas definiciones y tipos de inteligencia. También está la diferencia entre sabiduría e inteligencia. Aun cuando no estás siendo muy sagaz, ten la sabiduría de no disminuirte. Ésta frase puede ser intercambiada por “Pude haberlo hecho mejor”.

 “No puedo”

Ésta afirmación siempre viene ante una conversación sobre técnica y soporte, y después de un poco de práctica y esfuerzo, lo imposible se vuelve posible. Decide qué quieres hacer de acuerdo a tus prioridades y hazlo. No digas que algo es importante para ti y después quedes sin hacerlo por dificultades técnicas.

This statement always precedes a conversation about technique and support, then after practice and effort the impossible is done. Decide what you want to do according to your priorities and do it. Do not say that something is important to you and then mark it down with technical difficulties. Pones en juego la santidad de tus prioridades cuando haces esto. Ésta frase se puede intercambiar por “Esto será difícil” o “Necesitaré ayuda con esto”

“Me odio a mí mism@.”

Amor es la capacidad de cuidar, de proteger de nutrir. Si no eres capaz de generar ese tipo de energía hacia ti, si no eres capaz de cuidar de ti, de nutrirte, de protegerte, será muy difícil de cuidar de otra persona.

Ésta frase se puede reemplazar con un: “Puedo hacerlo mejor”, ‘Lo hare mejor’,

“Soy fe@.”

Este comentario se presenta en varias formas; estoy gord@, mi cabello es horrible, mis ojos están muy cerca entre sí, mi nariz tiene dos orificios. Todos son ridículos. La belleza viene del interior, surje de un espíritu saludable. La moda es la tontería que dice que la gente es esto o aquello. Sé bell@ y ámate. Ésta frase se puede reemplazar con un ¡Soy genial!, mi centro es tan fuerte o ¡soy bell@!

 “Detesto mi vida.”

No permitas que la locura en tu cráneo o la tormenta en tu corazón se manifieste en tus labios de ésta forma. Si estás molesto con tu vida ello quiere decir que te importa y estás más que frustrado. Dale voz a tu frustración y emociones pero no azotes a la historia única que es tu vida. Ésta frase no debe pronunciarse nunca, reemplázala con “estoy molesto” “Necesito ayuda” o “Quiero un abrazo”.

Jeff Wilson

Traducido por Karina Carlos