Procrastinar es una fuente poderosa de
resistencia emocional que nos afecta a todos.
No importa qué tan inteligente o enfocado
seas- todos dejamos cosas para después.
Todos somos propensos a dejar las cosas
para el futuro, pensando que de alguna forma podremos lidiar con ellas en
cuanto tengamos más tiempo para hacerlo.
Sin embargo, antes de que lo esperemos, el futuro se vuelve nuestro
presente y no nos hemos dado a la tarea de hacer nuestras actividades.
¿Qué demonio es la Procrastinación de la que tanto
se habla en estos días?
De acuerdo a la Real Academia Española,
procrastinar significa diferir o aplazar algo.
La procrastinación puede aparecer en
cualquier área de nuestras vidas y causar un verdadero caos.
Por ejemplo, reparar un techo con fuga,
entregar un reporte, visitar al dentista o lidiar con un problema estresante
con tu esposo (a) podrá parecer algo de poca importancia al principio pero una
vez que éstos pendientes se juntan es muy probable que termines enfrentándote
con sentimientos de depresión, duda de ti mismo, culpa y sintiéndote
inadecuado.
¿Puedes ser
feliz procrastinando?
Los expertos están de acuerdo que la
decisión de posponer tareas importantes tiene un impacto enorme en nuestro
nivel de felicidad. De hecho ver videos de gatos en lugar de hacer tu tarea te
lleva a tener sentimientos de culpa y lamento.
La procrastinación no es algo nuevo,
especialmente para los estudiantes. Un estudio que se realizó en septiembre de
2014 por dos profesores británicos demostró que más del 86% de los estudiantes no
eran capaces de entregar sus papeles de fin de periodo a tiempo sino hasta que
faltaran 24 horas para hasta la fecha límite.
Otro estudio similar llevado a cabo en 1984
en la Universidad de Vermont demostró que el 46% de los estudiantes
procrastinaban cuando de escribir sus documentos académicos se trataba. La
sorpresa venía a medida que se acercaba la fecha límite de entrega.
Los profesores involucrados en el estudio
notaron una tendencia perturbante- entre más cerca estuviera la fecha límite de
entrega, peor eran las calificaciones obtenidas. Es como si sus números bajaran
por minuto.
La razón de ésta tendencia perturbante es simple- la procrastinación ha
afectado su nivel de felicidad y por lo tanto su habilidad de hacer buenas
tareas. Y desde luego procrastinar no permite el tiempo para la revisión
necesaria para producir un trabajo de calidad.
¿Cómo afecta la procrastinación a tu felicidad y bienestar?
De acuerdo a un estudio realizado por el
Grupo de Investigación de la Procrastinación, el 94% de la gente cree que la
procrastinación tiene un impacto negativo en su felicidad y ha habido otros
estudios que lo demuestran.
La procrastinación habitual puede llevar a
estar insatisfechos en el trabajo, tener problemas en las relaciones
interpersonales, se pierde reputación, baja el autoestima y la lista continúa.
Se ha encontrado que los procrastinadores
acuden a toda clase de mentiras para justificar sus retrasos inesperados. Esto
lleva a sentir culpa, arrepentimiento y hasta vergüenza.
El ciclo de la procrastinación es
altamente predecible. Todo comienza con esperanza que se transforma en
ansiedad, auto-crítica, culpa y después a arrepentimiento. Otro proyecto o
tarea viene y el ciclo se repite de nuevo.
Éstas son algunas formas en las que la procrastinación se come poco a
poco a tu bienestar:
– Daña a tus relaciones
interpersonales: Llegar tarde a tus citas o posponer esa conversación
importante con tu pareja podrá dañar tu relación a la larga.
– Pierdes oportunidades: Sólo
piensa cuántas oportunidades has dejado pasar por caer en la trampa de la
procrastinación. Una cosa es segura, las oportunidades perdidas no regresan
nunca. De haberlas tomado algunas de éstas oportunidades te hubieran hecho más
feliz.
– Desaprovechas el tiempo: Perder
el tiempo es obviamente algo que afectará tu felicidad. Si pones gran énfasis
en el tiempo, entonces tu nivel de felicidad disminuirá exponencialmente por
desperdiciarlo en procrastinación.
– Baja el autoestima: De
acuerdo a muchos estudios, la gente que no logra completar tareas a tiempo
tienden a experimentar niveles más bajos de autoestima y confianza en sí
mismos, lo cual llevará automáticamente a un nivel de felicidad bajo.
Las 5 causas
principales por las que procrastinamos
La procrastinación nos afecta en tres
principales áreas en nuestras vidas: educación, carrera y salud. La
procrastinación puede ser de decisión y de evasión. Es decir el aplazar tomar
decisiones o evitar hacer ciertas cosas.
La procrastinación no viene sola.
La procrastinación es gatillada por
detonantes en el entorno. Los estudios muestran que las razones principales por
las que lo hacemos son:
1. Impulsividad: Ser
impulsivo te hace brincar de una tarea a otra haciéndote dejar algunas tareas
sin terminar para poder completar otras que parecen ser más importantes.
2. Estar desinteresado: Cuando no
estamos interesados en hacer algo, ya sea un proyecto o actualizar nuestro currículum
estamos procrastinando. Está en la naturaleza humana. Preferimos huir de las
actividades dolorosas y perseguir las actividades más placenteras.
3. Ansiedad: Con mucha frecuencia cuando
tenemos fechas de entrega, procrastinamos más en lugar de terminar a tiempo.
4. Perfeccionismo: Ser
perfeccionistas también nos lleva a procrastinar. Si bien hay áreas como los
deportes o la música en donde la perfección es importante, para mucha gente es este
deseo de ser el mejor su también su ruina.
5. Baja confianza en uno mismo: Por último, tener una
autoestima baja y un nivel bajo de auto-confianza lleva a tener miedo de tomar
acción cuyo resultado es la procrastinación.
Pero si somos
honestos con nosotros mismos sabemos que la mayoría de las veces la razón es la
flojera.
3 Formas de
vencer la procrastinación
La buena noticia es que la procrastinación
no es un enemigo infranqueable. En realidad puedes vencer a ésta limitación con
facilidad. Aquí te explico como:
1. Entra en la mentalidad correcta: Para empezar, debes comenzar por cambiar tu mentalidad. Carol
Dweck, el famoso autor de Mindset: La Nueva Psicología del Éxito, ha
revelado que una mentalidad o actitud adecuada permite que la gente logre cosas
increíbles. Trabaja en crear una mentalidad de ganador y estarás dos pasos más
cerca de saborear el éxito.
2. Evítala: Probablemente el método más
simple es alejarte de la procrastinación para evitarla en primer lugar. Para
hacer esto define unas cuantas metas con expectativas realistas. Tal como Tony Robbins
dice “la mejor forma de dejar de procrastinar es dejándola para después”.
3. Haz un seguimiento de tu tiempo: Anota en algún sitio qué tareas realizas cada día y cuánto tiempo pasas
en cada una. Al anotar tu tiempo creas un compromiso interno que te hace ser
más responsable con respecto a cómo lo utilizas.
Traducción y edición por Karina Carlos
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